Nos acercamos cada vez mas a la gloriosa fecha de octubre, nada me enorgullecería mas que una fiesta de Halloween bien hecha, Realmente no me molestaría si este año llueve, aunque últimamente a estado muy seco el clima.
El miércoles fui con mi mejor amiga a un centro comercial, era su cumpleaños y decidimos ir al cine, pero ya estando hay no pude evitar entrar a la tienda de mascotas para acariciar un cachorro, y ver algunos libros en la librería de alado, entre todos esos libros existe una sección de novelas para niños, y entre esas novelas están algunos tomos de la saga "Gosebumps" por R.L.Stine, la cual me encanta, en un principio sus historias eran una de mis inspiraciones para escribir libros de terror, sin embargo, aunque el precio es muy accesible, ya que la época dorada de esos libros acabo hace tiempo, los tomos que hay se encuentran están completamente en ingles, aun así tengo el deseo de buscar y comprar algunos, como "The night of the living dummy", y sus secuelas, creo que es por esta historia que los muñecos de ventrílocuo con vida propia me llamaban la atención, y muchos dicen que ay un gran parecido entre el muñeco de RL Stine (Slappy) y el muñeco de Muerte silenciosa (Billy), yo opino que si, pero no por ello uno es la copia del otro.
De esos libros, escritos por R.L.Stine, yo tengo unos tres o cuatro, siendo mi favorito "Llamada mortal" que no pertenece a la serie "Escalofrios" que era mas para niños.
Alguna vez, entre los libros que tuve la fortuna de hojear, encontré uno bastante grueso llamado "Yo mato" nunca lo termine de leer, pero algún dia me lo volveré a encontrar por casualidad en una repisa de libros de terror y me lo acabare, recuerdo que lo comencé a leer después del libro de "El demonio y la señorita Pyr", escrito por Paholo Cohelo, de este autor también comencé a leer "Veronika decide morir", pero tampoco lo termine.
Otro autor del que me gustaría leer aunque fuera un libro, es de Stephen King, en aquella biblioteca había tantos libros de el, pero nunca me anime a tomar uno, supongo que sabia que me embebería leyendo y olvidaría regresar a casa, eso me pasa comúnmente con los libros, y me ocurre desde que tengo memoria, pues para ser una chica que lee desde los 2 años de edad, es raro el día que no acepte un ameno rato en compañía de un gran libro, no estoy diciendo que todos los días este leyendo, pero si la ocasión se da, que mejor que pasar el tiempo entre tinta, hojas y un envolvente mundo ajeno a nosotros, que podemos controlar cerrando el libro, es la mejor forma de viajar sin salir de tu segura y cómoda casa, sin gastar mucho y pudiendo regresar cuando lo desees.
Leer es un escape momentáneo a mi mente retorcida.
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